Dans le palmarès des mystères scientifiques, celui-là tient une place de choix. Mesuré au poids, c’est même assurément la première. Et pour cause : la « matière noire », puisque c’est d’elle qu’il s’agit, représente rien de moins que 80 % de toute la masse de l’Univers. Tout ce que nous pouvons toucher, regarder, détecter, tout ce que nous connaissons – du premier proton à la dernière galaxie – ne représente que 20 % de la matière totale. Le reste est… un mystère. Depuis trente ans, les scientifiques s’affrontent à coups de théories, multiplient les expériences pour tenter de mettre en évidence cette matière noire. En vain. Aussi, chaque grain de lumière dans ce ciel obscur prend un éclat particulier.
Anomalies venues du Soleil
Et, depuis huit mois, le milieu est en ébullition. En février, deux équipes d’astrophysiciens ont détecté, dans des données satellitaires, des signes qui pourraient témoigner de la présence de matière noire. Le 20 octobre, une troisième équipe, britannique celle-ci, a publié, dans les Monthly Notices of the Royal Astronomical Society, un article faisant état d’anomalies venues du Soleil, là encore attribuées à la mystérieuse matière. Deux théories distinctes, mettant en jeu différentes particules, repérées dans différentes zones de l’Univers… et à peu près incompatibles. « Il faut évidemment être très prudent, attendre des confirmations, mais tout le monde est excité », admet Yannick Mellier, de l’Institut d’astrophysique de Paris.
Las agitaciones de la materia oscura
En el ránking de misterios científicos,este ocupa un lugar especial. De tanto peso que es seguramente el primero. Y con razón: la "materia oscura", ya que de eso se trata, representa nada menos que el 80% de la masa del universo. Todo lo que podemos tocar, mirar, detectar, todo lo que conocemos - desde el primer protón a la última galaxia - no representa más que el 20% de la masa total. El resto es...un misterio. Después de 30 años, los científicos se enfrentan a muchas teorías,multiplican los experimentos para intentar poner en evidencia esta materia oscura. En vano. También, cada pizca de luz en el cielo tiene un brillo particular.
Anomalías venidas del Sol
Y, ocho meses después, el centro está en ebullición. En febrero, dos equipos de astrofísicos detectaron, en unos satélites, signos que podrían demostrar la presencia de materia osucra. El 20 de octubre,un tercer equipo, éste británico, publicó, en las Monthly Notices of the Royal Astronomical Society, un artículo informando anomalías venidas del Sol, todavía atribuídas a la misteriosa materia. Dos teorías distintas,poniendo en juego diferentes partículas, localizadas en diferentes zonas del universo... y más o menos incompatibles. "Evidentemente hace falta ser muy prudentes, esperar confirmaciones, pero todo el mundo está emocionado" admite Yannick Mellier, del Instituto de Astrofísica de París.
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Juan Martín Romero Fiorotto, 4º ESO A
Anomalías venidas del Sol
Y, ocho meses después, el centro está en ebullición. En febrero, dos equipos de astrofísicos detectaron, en unos satélites, signos que podrían demostrar la presencia de materia osucra. El 20 de octubre,un tercer equipo, éste británico, publicó, en las Monthly Notices of the Royal Astronomical Society, un artículo informando anomalías venidas del Sol, todavía atribuídas a la misteriosa materia. Dos teorías distintas,poniendo en juego diferentes partículas, localizadas en diferentes zonas del universo... y más o menos incompatibles. "Evidentemente hace falta ser muy prudentes, esperar confirmaciones, pero todo el mundo está emocionado" admite Yannick Mellier, del Instituto de Astrofísica de París.
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